Más que un thriller al uso con sus marcados códigos, esta es una enrarecida y por momentos asfixiante cinta trágica, más próxima a cierto costumbrismo del que se parte, tan conciso como repleto de verdad, y que va derivando lentamente, y en su totalidad, hacia una narración global sujeta a una vehemente pulsión vengativa, protagonizada primordialmente por antihéroes.
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